Hay tres pilares que tiene toda organización que se precie de tener éxito: (Personas Efectivas, Ejecución Impecable y Liderazgo genuino). De los tres el Liderazgo es el responsable de los otros y en función de esto una organización tiene el techo que tiene su Líder, en otras palabras, una organización jamás puede superar a su Líder, al desarrollo de su líder y al crecimiento de su líder.
Por este motivo es tan crucial saber que es ser un Líder, ya que del futuro que sea capaz de crear este, depende el futuro de la compañía.
Según Stephen M. R. Covey uno de los principales autores de era actual el Liderazgo es producto de nuestras elecciones, no es algo que se nos otorga, o que logramos al llegar a un determinado puesto; es en definitiva una elección individual y lo define como:
“Liderazgo es comunicar a las personas su valía y potencial de manera tan clara que ellas llegan a verlos en sí mismas.”
—Stephen R. Covey
Una de las principales tareas del liderazgo es crear más líderes, no más seguidores y solamente las personas efectivas y de carácter sólido, están en condiciones de tomar esta elección de manera genuina sin transformarla en manipulación.
Las ventajas de un Liderazgo genuino son fundamentales; es que cuando realmente estamos comprometidos con nuestros colaboradores, cuando realmente mostramos genuino interés en sus vidas y sus oportunidades de crecimiento, las personas (en su gran mayoría) entregan voluntariamente su talento, su compromiso y su pasión.
Una distinción importante es la que existe entre Gerencia y Liderazgo.
Los más grandes retos que enfrentan las organizaciones no son del lado técnico, sino del lado humano. Estos retos se centran en las preguntas de cómo superar la resistencia y lograr el compromiso total de todo el potencial de la gente. Este es uno de los roles claves de los líderes, transformar resistencia en compromiso. Ayudar a los líderes a adquirir esta habilidad es la esencia de otorgarle autoridad al liderazgo.
El liderazgo y la gerencia no es lo mismo. La gerencia tiene que ver principalmente con los aspectos técnicos, medibles y controlables de una organización: planeación estratégica, organización personal, delegar, control y entrenamiento. El liderazgo, por otro lado, tiene que ver con factores menos controlables y medibles como dirección, visión, compromiso e integridad. La efectividad organizacional depende de tener tanto liderazgo como gerencia y contar con un balance adecuado de ambos.
Se dice que el liderazgo atiende la pregunta, “¿Hacia dónde vamos?,” mientras que la gerencia responde a la pregunta, “¿Cómo llegamos allá?” Sin embargo, el liderazgo, debido a su potencial para transformar la resistencia en compromiso, puede tener tanto qua ver con el “Cómo llegamos allá” como la gerencia –quizás más. Aunque el desarrollo sistemático del liderazgo es una de las áreas desatendidas en las organizaciones en el presente. Recientemente, se ha prestado más atención al desarrollo gerencial. Ahora y en el futuro, sin embargo, el liderazgo constituirá la ventaja competitiva clave.
Irónicamente, la razón por la cual la mayoría de las compañías no alcanzan sus metas es que están enfocadas en sus metas. Mientras más se enfoquen en sus metas, más se resisten las fuerzas psicológicas y culturales. Por esta razón, se vuelve más difícil lograr sus metas. Como resultado, es posible incluso que disminuyan su perspectiva y pierdan de vista su visión. La alternativa a enfocarse en las metas es enfocarse antes en las fuerzas restrictoras que se oponen a las metas. Enfocándose en las fuerzas restrictoras, esta espiral que apunta hacia abajo puede ser invertida y la resistencia puede ser transformada en compromiso.
Uno de los logros más grandes del liderazgo es transformar las fuerzas restrictoras en compromiso. Existe un continuo completo de sentimientos de los empleados hacia la misión o visión de una organización. Es posible que se revelen contra esta. Es posible que se muestren neutrales o apáticos hacia esta. Es posible que sólo hablen la boca hacia afuera. Es posible que apoyen ciertos aspectos de ésta, o la adopten totalmente y se sientan enteramente comprometidos. El grado en el cual están comprometidos determinará el grado en el cual apoyarán la visión.
Todo esto no es trabajo de un día o de un solo taller, se trata de un cambio secuencial interno (de adentro hacia afuera) que todo Líder debe realizar para transformarse en líder. Esa es la elección del Liderazgo, la elección de ser puente y oportunidad que crea en las organizaciones grandeza sin importar si es una MiPyME o una Multinacional, si es una organización con fines de lucro o sin fines de lucro. Una organización no se puede desarrollar más allá de sus líderes.
Carlos Mayol – [email protected]